Lo leí esta mañana en Mad for Fashion y no pude evitar pinchar el enlace…
Las ilustraciones me han parecido preciosísimas. Son de la ilustradora colombiana Catalina Estrada, que ha ilustrado las portadas de los libros de Coelho, colecciones y etiquetas de Zara Home; campañas de Coca-Cola y Schweppes y Paul Smith, entre otras.Algunas de mis favoritas con los búhos como protagonistas.
La autora, Catalina Estrada
A mi sus ilustraciones me recuerdan a la película de Romeo y Julieta (la moderna, de Di Caprio y Claire Dance) y a Frida Calho y a México…
Pues bien, en la web de ELLE podréis descubrir el “mapa secreto de vuestra vida” según la numerología, cuál es vuestro número y lo que os depara el 2011… Mi número es el
EL COMUNICADOR. Ésta es la energía de aquellos que vienen a experimentar una vida llena de aventuras y acción. Estas personas traen el propósito de abrirse a la libertad y hacer muchos viajes. Su alma ambiciona experiencias que permitan vivir con intensidad, buscan sentir una vida diferente a lo convencional.
Lo más probable es que acaben residiendo fuera de su lugar de nacimiento, ya sea en otra ciudad dentro del mismo país o en el extranjero. Lo distinto y lo diferente les atraerá como un imán, pues su alma entusiasta necesita exprimir al máximo todo. Es crucial que escuchen su voz interior, esa que les dice que la vida es un momento, que todo pasa muy rápido y que mañana será más complicado iniciar esa nueva etapa que están deseando hacer realidad. El cinco es el comunicador que viene a movilizar el mundo, el que sacudirá con su acción nuestras conciencias acomodadas en un estado de falso bienestar.
En 2011: Se abrirá una etapa ideal para demostrar en el trabajo esas capacidades dormidas, apostar por una nueva profesión o dar un giro a la vida.
La verdad es que soy bastante escéptica con estas cosas (horóscopos, adivinos, echadores de cartas y demás) pero he de confesar que se corresponde bastante con lo que siento, pienso y quiero hacer. Me voy.
Además últimamente pienso bastante en algo que oí hace poco y que me anima a conseguir la fuerza de voluntad que necesito para poner cada elemento de mi vida en su lugar (cualquiera que sea, incluso en el olvido). No quiero hacer borrón, pero sí una cuenta nueva; porque nunca es tarde, si la dicha es buena ¿no? O eso decía mi abuela.
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