Continúa la tendencia esta primavera-verano, el personaje de Vladimir Navokov sigue en escena.
El estilo Lolita toma las calles, las casas…
Y yo encantada… colores pastel, ácidos, clásicos, lunares, lazos, estampados naïf, provocadora inocencia, sensualidad, erotismo, labios carmín… y mucho, mucho deseo… ¿ prohibido?
“Lolita” como todas las grandes obras maestras, es muchas cosas al mismo tiempo… Tragedia, melodrama, historia de amor, astuta crítica de la sociedad que relata, la novela es una metáfora de los recovecos del deseo, de la seducción y la dominación, que culmina con la catarsis y autodestrucción de los personajes principales, en la que Nabokov parece decir que todos podemos convertirnos en Humbert y todas las Lolitas están destinadas a dejar de serlo.
Como bien dice la Wikipedia, “Los conceptos morales provenientes del concepto de "perversión", suministrados por los enfoques psicopatológicos, permiten dudar de que esta sea propiamente una novela de amor”.
Llevada a la gran pantalla en dos ocasiones: en 1962 por Stanley Kubrick, y protagonizada por Sue Lloyd, Shelley Winters, Peter Sellers y James Mason, y posteriormente en 1997, por Adrian Lyne, con Dominique Swain, Jeremy Irons y Melanie Griffith…desde mi punto de vista, con mucha menos suerte cinematográfica, digamos que le falta algo…
Creado en la literatura, este mítico personaje está representado en la moda y en la música, como en la canción “One of the boys” y en el estilo de su cantante Katy Perry
y en la factoría de los sueños y la imaginación, de nuevo en el cine, la película An Education, me recuerda un muchísimo al argumento de Navokov, un buen ejercicio sobre la moral, un atractivo hombre maduro que enamora a una brillante jovencita…. Os dejo el tráiler y me quedo con la crítica "es una película tan fácil de ver como de olvidar”.
Feliz viernes!
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